Marrakech, una ciudad no apta para cardíacos ni para amantes de la rutina ni para los que gustan de “donde dije digo, digo digo y no Diego”. Quédense con esa frase porque si algo puede salir mal, saldrá no mal, sólo distinto. Diferente de lo esperado. ¿Pero acaso no es eso viajar? La vida en esencia pura o como dice un proverbio árabe (por eso de contextualizar el dicho) “Aquel que no viaja no conoce el valor de los hombres”.Continue Reading..